EL PODER DE UNO MISMO
Había una vez un hada noble que
por más que pensaba no hallaba solución a su problema.
Todos sus amigos y sus amigas tenían
desarrollado un gran poder con el que ayudar al prójimo. Sin embargo ella, Filo, no tenía ningún don ─
¿Será porque soy humana? ─se preguntaba a veces la joven hada. Pero eso era
imposible pues era pequeña y voladora como las hadas buenas de la primavera─,
entonces, ¿porque yo no tengo poder?
Decidió partir en busca de
repuestas, visitaría al sabio de las montañas quién seguramente le daría sus
razones.
Ella no se daba cuenta, pero en su camino hacia las montañas,
los campos arrasados por las nieves y heladas del invierno iban a su paso
floreciendo y pintándose de luminosos colores, los pajarillos aparecían animando
su camino… caminando caminado se encontró una tortuga:
─ ¿Hola hada buena, podías ayudarme?
─! Claro! ─contestó entusiasmada la joven─, ¿qué puedo hacer por
ti?
─Sólo necesito consejo, si tú fueras una
tortuga lenta como yo ¿qué harías para ser más rápida y destacar?
─! Uunn, déjame pensar! ─dijo la joven reflexionando─
Yo creo que no haría nada pues estaría fuera de mi alcance cambiar mi
naturaleza, creo simplemente que intentaría ser una buena y lenta tortuga.
─Tienes razón amiguita ─dijo la tortuga,
mientras se transformaba en el sabio a quién ella iba buscando─ Mi querida
Filo, al saber que venias he decidido venir a tu encuentro y ayudarte, para
que te respondas a la pregunta que querías
hacerme, sin embargo hay algo que todavía no has visto pequeña.
─Mi querido Sabio ¿Qué es lo que mi vista no
ha percibido?
─A tu paso el campo arrasado por el invierno y
por la mano del hombre ha florecido resplandeciente, mi querida amiga tu poder
es traer la primavera y sin ningún otro don extraordinario, debes hacerlo lo
mejor que sepas.
─Tienes razón, el campo esta precioso ahora,
me siento afortunada, pues no necesito poderes para ser extraordinaria,
gracias.
Y así la joven comprendió que para destacar y
ser importante sólo hay que mirar alrededor y observar lo que sucede en tú paso
por el mundo.
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