FELIZ FIN DEL MUNDO
Queridos amigos, aquí me encuentro otra vez dispuesta a
hacer balance de otro año que ha pasado así, sin darme cuenta ¿no tenéis la
sensación de que el tiempo se escurre de las manos como si fuera gel?
Este año tengo mucho examen de conciencia que hacer, puesto
que he sufrido y de esa aflicción han surgido sentimientos negativos, el odio, que de ninguna manera había aflorado antes en
mi interior, aunque si la rabia, por que
al ser una persona muy temperamental sufro mucho con las injusticias.
El odio hacia un ser,
sin embargo nunca lo había experimentado y creo que mientras escribo hoy aquí, me doy cuenta que en realidad tampoco me ha
ocurrido esta vez, es pura frustración, pues en esta ocasión es una injusticia vivida en propias carnes. No, en realidad no quiero sentir odio, más bien voy a
sentir pena, pues las personas que hacen daño al final sufren en sus propias
carnes ese daño.
Dejando atrás este tema, mi intención con esta entrada era
hacer balance antes de mañana, queridos amigos; ¡se acaba el mundo! Nosotros desde
aquí pensamos que no va a ocurrir nada, si acaso todo lo que ocurra a partir de
hoy será como una tarta, rico rico. Parece sin embargo que el mundo, según los
mayas, dará un giro y lo que hemos conocido hasta hoy dejará paso a algo nuevo,
mucho mejor.
Por si acaso eso que va a ocurrir es el fin del mundo quiero
dar las gracias a ED, mi otro yo que últimamente está muy ocupado con un
invento maravilloso y no tiene tiempo
para escribir, a alguno de vosotros que os conozco y os aprecio, cito por
ejemplo, a ti Luis, gracias, ¡feliz navidad! A ti María José, ¡feliz navidad! Escribidme,
hace mucho que no se de vosotros. A
todos los demás que aunque anónimos nos habéis acompañado en esta vieja existencia
que parece ser, concluye mañana. No pasa nada no debe cundir el pánico pues los
gobiernos no han puesto en marcha los mecanismos para este tipo de tragedias,
por tanto nos vemos mañana y bueno ya comentaremos como ha ido todo.
Recordamos que para pasar la ralla del nuevo año es
importante hacer autocrítica, dejar a un lado todo lo malo y llevarnos lo
positivo dentro de la mochila, para con ello empecemos el 2013 (fijaos impar, eso
sólo puede ser bueno) y caminemos sin peso, pues lo bueno no pesa al contrario,
ayuda es increíble pero es cierto; ayuda a continuar el camino del nuevo año
con optimismo, creatividad, propósitos y felicidad.
A la gente de buena voluntad que el año 2013 esté lleno de
proyectos maravillosos.
Podíamos hacer algo crear una cadena de buenas intenciones o
una cadena de pensamientos positivos para que el planeta no se enfade y nos
deje vivir un poquito más ¿Qué os parece?
Feliz fin del mundo.
Comentarios