El Comerciante en el Monasterio.
!!Así de cruel es mi desgracia!! Treinta años e comerciado con pescado en el mercado mas importante de la ciudad, y siempre las mejores ventas fueron de mi competidor quien tiene el expendio frente al mió; Hace dos años recibí una gran herencia y decidí crecer mi negocio cinco tantos mas de lo que solía ser, lo mande construir tan vistoso y atractivo como pude pagando a grandes artistas para que lo decoraran y contrate muchos empleados, pero la maldición continua sobre mi cabeza pues aquel competidor que tengo enfrente continua vendiendo mas que Yo . . . . . . . . . ¡Maestro¡ ¿Por qué me sucede esto a Mi? ------ El Monje le miro a los ojos y con una suave sonrisa le dijo al Comerciante ------- Hermano sabrás tu que es bueno ser grande pero. . . siempre será mas grande ser bueno.